Reducción de Accidente – Detección de objetos con sistema de alertas que proporciona a los operadores el tiempo para responder a los peligros y evitar colisiones. Un solo accidente en una mina superficial puede tener consecuencia devastadoras para el personal y maquinaria. Sistemas anticolisión pueden ayudar a los operadores de las minas a reducir al mínimo el riesgo de accidentes y lesiones y pueden traducirse en reducciones de costes y mejoras en la eficiencia.

La visibilidad disminuida juega un papel importante en muchos accidentes mineros. El tamaño y la potencia del equipo de excavación deja poco margen para el error, los puntos ciegos pueden ser muy grandes y situados en los lados de un vehículo. Polvo, suciedad y residuos durante la excavación pueden tener un efecto perjudicial sobre la visibilidad y el rendimiento del equipo. Las condiciones climáticas, viento, lluvia y nieve, son complicaciones adicionales.

Para ayudar a superar estos desafíos, un proveedor de maquinaria para la industria minera instaló sensores radar de Banner en la parte delantera y trasera de sus camiones. Los sensores radar de Banner proporcionan detección de objeto activo en los puntos ciegos del vehículo sin sobrepasar el coste y el tiempo que se utiliza para la instalación de los dispositivos anticolisión existentes.

Los sensores emiten haces en forma de abanico de ondas de radio de alta frecuencia. Para evitar falsas alarmas, cada sensor se ha configurado para crear una zona de detección correspondiente a su punto ciego, ignorando objetos fuera de zona. A medida que los objetos entran en el área de detección, se altera el retraso de tiempo de regreso de la señal, accionando una luz indicadora para iluminar. Un sistema de vídeo vigilancia a bordo le permite el operador comprobar si hay alguna obstrucción.

Condiciones que han desafiado a otras tecnología de sensores, como los sensores ultrasónicos utilizados en los vehículos de consumo, no son un problema para los sensores R-GAGE. Las ondas de radio son impermeables a la suciedad, al polvo, al viento, a la lluvia y a otros desafíos ambientales. Cada sensor está protegido por una carcasa robusta clasificada IP67, la cual asegura su operación confiable, aun cuando se encuentre cubierto de lodo.